16 febrero 2011

Digitalización del patrimonio europeo y derechos de autor

El Comité de Sabios, designado por la Unión Europea para estudiar cómo llevar a cabo la digitalización del patrimonio cultural europeo, emitió su informe el pasado mes de enero. Este documento, titulado "El Nuevo Renacimiento", destaca las ventajas económicas, culturales, educativas y en innovación que conlleva para la sociedad europea la digitalización de las obras de museos, bibliotecas y archivos. Todo ello respetando los derechos de autor.

Este informe propone, entre otras cosas, que el portal Europeana se convierta en la plataforma de referencia donde se aloje ese patrimonio cultural europeo. Establece, además, que la digitalización de las obras que ya no se comercializan vaya aparejada de una remuneración para sus titulares.

Por otra parte, para las obras huérfanas, recomienda que su acceso se realice de forma transfronteriza y que se compense a los autores de estas creaciones que puedan ser identificados en un futuro. En relación a este tema, expresa la necesidad de apoyar las bases de datos que contengan información sobre este tipo de obras.

[Fuente: CEDRO]

05 febrero 2011

Un sensor protege las obras de arte de las agresiones ‘invisibles’

Arriba, detalle del medidor de ph. Abajo, de izquierda a derecha, reacción del sensor frente a un ambiente básico, neutro y ácido.

Los bienes culturales, como los cuadros y los manuscritos están amenazados por agresiones externas como la luz y los contaminantes del aire que pueden deteriorarlos de forma irreversible. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha desarrollado el primer dispositivo capaz de medir la acidez del aire de forma sencilla y económica, que alertará sobre posibles casos de exposición nociva para las obras del patrimonio cultural. El aparato, cuya patente está compartida al 50% entre el Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC y la Universidad Politécnica de Madrid, favorecerá la conservación preventiva de este tipo de bienes patrimoniales.

La superficie del sensor reacciona con los contaminantes y otras partículas del aire y cambia de color en función de su concentración, por lo que “cualquier usuario no cualificado podría monitorizar el pH ambiental a simple vista gracias” a una escala cromática previamente definida, explica una de las investigadoras del CSIC responsables del proyecto, Mª Ángeles Villegas. A pH normal, el dispositivo presenta un tono rosado que va perdiendo su color según aumenta la acidez hasta volverse amarillo. Por el contrario, cuando el contenido ácido del ambiente disminuye, la superficie del sensor se torna violeta.

Además, el equipo ha desarrollado un sistema que telemedida capaz de transformar la señal óptica registrada por el sensor en una señal eléctrica. De esta forma, la información puede ser transmitida y almacenada en un ordenador. Gracias a ello, “serán posibles otras aplicaciones en cuestiones relacionadas con la calidad ambiental, como el control de humos y de vertidos industriales”, señala Villegas.

El dispositivo desarrollado por el CSIC no requiere una fuente de alimentación externa y su película reactiva es reversible, lo que le permite ser usado de forma continua. Es, por tanto, un sensor reutilizable del que Villegas también destaca “su bajo coste”. Además, el dispositivo mantiene su estabilidad térmica entre los -5ºC y los 60ºC.

“El proceso de deterioro de los bienes del patrimonio histórico y cultural se ha visto acelerado de un modo preocupante en el último siglo”, alerta Villegas. Según la investigadora, una de las causas puede ser el aumento de emisiones procedentes de motores, sistemas de calefacción y centrales térmicas, entre otras actividades. Estos procesos provocan la liberación a la atmósfera de dióxido de azufre (SO­­­2) que en presencia de la humedad ambiental producen un fenómeno conocido como lluvia ácida. El volumen que suele generarse no llega a precipitar, por lo que permanece en la atmósfera en forma de acidez ambiental.

El pH del aire oscila normalmente entre 6 y 7. No obstante, “la propia madera presente en los muebles y vitrinas de algunos museos puede emitir ácidos y alterar la conservación de otras piezas”, explica Villegas. Además, la acidez ambiental puede afectar desde obras en piedra hasta textiles, vidrios y papeles.

Para comprobar la efectividad del sensor desarrollado por el CSIC, el equipo lo validó previamente en diversos edificios del patrimonio construido como el Palacio Real de Milanów de Varsovia (Polonia), el fondo documental de la Biblioteca Tomás Navarro Tomás de Madrid y la Real Fábrica de Vidrios y Cristales del Real Sitio de San Ildefonso (Segovia). “Uno de los factores más influyentes es la humedad ambiental, que si aumenta en presencia de contaminantes de características ácidas da lugar a compuestos que disminuyen el pH lo que provoca un ambiente más ácido”, explica Villegas. Según la investigadora del CSIC, “esto es perjudicial para la correcta conservación de los bienes patrimoniales, tanto en exteriores como en interiores”.

[Fuente: CSIC]

02 febrero 2011

Tres museos de Nueva York y otro de Washington se suman al Art Project de Google

Tres museos de Nueva York, la Colección Frick, el de Arte Moderno (MoMA) y el Metropolitan, y otro de Washington, el Freer Smithsonian, se suman desde este martes al proyecto de Google para que los usuarios de Internet puedan explorar virtualmente sus miles de obras de arte.

Los cuatro museos estadounidenses forman parte de la iniciativa Art Project, presentada este martes en Londres y que engloba a 17 de los más importantes del mundo, como los españoles Reina Sofía y Thyssen-Bornesmiza, la Galleria degli Uffizi (Italia) o el británico Tate.

El nivel de calidad de la imagen permite apreciar las pinceladas. Con un "click" de ratón de computadora, la iniciativa permite a los usuarios de Internet recorrer esos 17 museos de once ciudades en nueve países, así como a las obras de 486 artistas expuestas en 385 salas, además de más de mil imágenes artísticas en alta resolución y 17 "gigapixel" fotos.

La directora de la Colección Frick de Nueva York, Anne Poulet, señaló que esta colaboración museística internacional con el portal de Internet "representa una síntesis fascinante entre arte y tecnología, que reforzará las maneras en que el gran público puede acceder al arte, además de proporcionar a los educadores nuevas herramientas para compartir sus impresiones y descubrimientos".

Los usuarios de esta nueva herramienta artística y educativa tienen también la posibilidad de hacerse con su propia colección personal de arte virtual, así como de comentarla.

La visita virtual a esa prestigiosa entidad neoyorquina comienza a través de la obra renacentista San Francisco en el desierto, de Giovanni Bellini (1430-1516). La técnica permite que los visitantes virtuales pueden ver con un increíble detalle la figura central del santo, incluidas las pinceladas, con que Bellini pintó los animales, las plantas y hasta los objetos o la mirada de San Francisco.

Las imágenes en alta resolución aportadas por estos museos pueden ser ampliadas y revisadas con todo detalle mediante la herramienta de "zoom" que aparece en cada una de ellas.

La visita al MoMA comienza por la imagen de Noche estrellada, de Vincent Van Gogh. Este museo neoyorquino ha incluido entre las obras que forman parte de esa visita virtual La forja, de Francisco de Goya (1746-1828), un autorretrato de Rembrandt van Rijn (1606-1669), El progreso del amor: El encuentro, de Jean-Honoré Fragonard (1732-1806), entre otras piezas de Johannes Vermeer, Jean-Auguste Ingres o Pierre-Auguste Renoir, entre otros.

La visita al Metropolitan a través del ordenador personal empieza por La cosecha, de Pieter Brueghel el Viejo (1525-1569), para seguir por otras impresionantes piezas como Vista de Toledo, de Doménikos Theotokópoulos El Greco (1541-1614), en la que se aprecian con todo detalle las pinceladas de un paisaje que refleja los desniveles arquitectónicos de la ciudad española en una oscura atmósfera.

Este museo también ha incluido la escultura Ugolino y sus hijos, de Jean-Baptiste Carpeaux (1827-1875) e importantes obras de Paolo Veronese, Jacques-Louis David, Paul Gauguin, Edouard Manet o Rembrandt, entre las más diversas representaciones artísticas de diferentes culturas.

La visita al MoMA comienza por la imagen de Noche estrellada, de Vincent Van Gogh (1853-1990), para seguir con un recorrido sobre la obra de Paul Cézanne (1839-1906), como Château Noir, un bodegón con manzanas y una jarra de leche o un autorretrato del pintor francés, sin olvidar a alguno de sus destacados bañistas. A ellos se añaden destacadas obras de Gauguin, Odilon Redon, Henri Rousseau o Georges-Pierre Seurat, entre otros.

Las imágenes en "gigapixel" proporcionadas por el museo Smithsonian de Washington incluyen The Princess from the Land of Porcelain, del estadounidense James McNeill Whistler (1834-1903) y otras veinte obras suyas, así como importantes representaciones artísticas de la cultura china, japonesa o de caligrafía árabe.

[Fuente: EFE]

01 febrero 2011

Leer la Alhambra. Guía visual del Monumento a través de sus inscripciones

La Fundación Ibn Tufayl de Estudios Árabes, en colaboración con el Patronato de la Alhambra y la Editorial Edilux, han publicado Leer la Alhambra. Guía visual del Monumento a través de sus inscripciones de José Miguel Puerta Vílchez.

No basta con ver la Alhambra para hacerse idea cabal del designio de sus construcciones y de la honda raíz de su magnificencia; para ello es preciso leerla: leer lo que en sus muros, en sus arcos, en majestuosos paños y en diminutos rincones, escribieron sus constructores.

Esta guía reproduce de manera eminentemente gráfica y visual la gran arquitectura de textos que es la Alhambra de Granada, trasformando sus paredes en las páginas de este libro.

Además de los datos históricos y artísticos esenciales de cada espacio, la guía incluye:

- 53 poemas traducidos (40 conservados y 13 desaparecidos)

- Inscripciones fundacionales, coránicas, votivas, regias, jaculatorias y sentencias a nuestro alcance

- 1100 fotografías

- 47 dibujos

- 16 planos generales y de situación

- Un total de 368 páginas a todo color

El diseño de este libro permite contemplar, leer y comprender de manera fácil y directa las diversas inscripciones de cada muro y estancia, puesto que se ofrece la imagen de todas ellas en su contexto y acompañadas de su escritura en árabe, su transcripción fonética y traducción.

Este libro es una herramienta imprescindible para hacer de la visita al Monumento, no sólo un disfrute para los sentidos, sino un profundo acto de comprensión de los modos de representación y pensamiento que le dan su sentido.

José Miguel Puerta Vílchez (n. Dúrcal, Granada, 1959), es doctor en Filología Árabe, profesor del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Granada y autor también de Los códigos de utopía de la Alhambra de Granada (Granada, 1990), Historia del pensamiento estético árabe (Madrid, 1997) y La aventura del cálamo (Granada, 2007).

[Fuente: Fundación Ibn Tufayl de Estudios Árabes]