|
Dunas del Chato (Cádiz) [Foto: Patronato Provincial de Turismo de Cádiz] |
La
Vía Augusta, conocida como la calzada romana más larga de la antigua
Hispania
romana, unía los Pirineos con Cádiz, pasando por el Mediterráneo y
adentrándose en Andalucía por ciudades como Sevilla y Córdoba, hasta
llegar a Cádiz.
En los últimos años esta vía jacobea ha generado
cada vez más adeptos, pues los viajeros que acuden a la capital gaditana
en demanda de información han ido aumentando. Así lo indican los
miembros de la Asociación Gaditana Jacobea Vía Augusta de Cádiz, a cuya
sede en la gaditana calle de Sopranis acuden peregrinos de todas partes (sobre todo
extranjeros) en demanda de información y solicitando credenciales para
iniciar su andadura. Porque son varios los caminos que llegan a Santiago
y el de la Ruta de la Plata que comienza en Sevilla, puede recorrerse
incluso desde mucho más al sur.
Dicha Asociación gaditana, se ha
encargado de señalar la ruta con las clásicas flechas amarillas
conectándola con la Vía de la Plata. De esta forma, el peregrino que lo
desee puede comenzar su periplo a Santiago desde poblaciones de nuestra
provincia gaditana, y concretamente desde la capital.
|
Trazado de la Vía Augusta por la provincia de Cádiz [Imagen: Blog Entorno a Jerez] |
El Camino
empieza en la Catedral de Cádiz, auténtico kilómetro cero de la ruta a
Santiago,
y finaliza en la Catedral sevillana, en cuya Puerta de la
Asunción puede admirar una estatua de Santiago peregrino. Fin y
comienzo. Omega y Alfa, pues aquí finaliza el Camino desde Cádiz, la Vía
Augusta, pero comienza la Vía de la Plata.
La distancia
Cádiz-Sevilla por la ruta señalizada es de
190 kilómetros, dividida en
siete etapas, siendo totalmente apto el trazado para bicicletas.
Entre
los lugares más emblemáticos por los que atraviesa esta ruta jacobea se
encuentran el Barrio de El Pópulo (Cádiz), la calle Real e Iglesia
Mayor (San Fernando), la iglesia de San Sebastián (Puerto Real), el
convento del Espíritu Santo (El Puerto), la iglesia de Santiago (Jerez),
la zona de lagunas de El Cuervo, las Atalayas de Montújar o el Puente
de Alcantarilla (entre Las Cabezas y Utrera), donde se puede ver sobre
su pilar central la inscripción
AVGVSTVS PONTEM, que confirma que
el sendero sigue por el histórico camino de época romana. Finalmente se
interna en Alcalá de Guadaíra y se dirige a Sevilla a través de su
barrio de Santa Cruz para finalizar en la mayor catedral de la
Cristiandad.
Las poblaciones por las que pasa el sendero son desde
Cádiz, San Fernando, Puerto Real, El Puerto de Santa María, Jerez de la
Frontera hasta llegar a Sevilla, pasando por El Cuervo, Las Cabezas de
San Juan, Lebrija, Utrera, Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra. En estas
dos últimas el sendero se divide, el viajero puede elegir entre ambas
con rumbo a Sevilla a través de una de las poblaciones.
Concretamente
en Cádiz ciudad, el sendero recorre lugares indispensables como la
Catedral Vieja, en la Plaza Fray Félix, el antiguo teatro romano del
Pópulo y el Arco de los Blancos. Continúa por el Barrio de Santa María y
la antigua Cárcel Real, ahora Casa de Iberoamérica.
Cuando el
viajero llega a San Fernando atraviesa la Calle Real, pilar base de la
ruta, ya que conectaba a Cádiz con el resto de la península. Su nombre
era Camino Real en la época de los romanos. La Iglesia Mayor de San
Pedro y San Pablo, puede verse en esta parte del sendero, construida en
el siglo XVIII, la que fue el primer lugar en el que los diputados de
las primeras Cortes Constituyentes de España (1810) realizaron su
juramento antes de trasladarse al teatro de la ciudad. Como dato curioso
del viaje, en esta Iglesia se encuentra el Cristo de mayor relevancia
de la ciudad, El Nazareno. Según cuenta la tradición, en 1751 su imagen
fue hallada en el antiguo mesón del Duque, en un equipaje que dejaron
dos viajeros italianos.
Entre las ciudades de San Fernando y Jerez de
la Frontera, por donde pasa la ruta, atravesando Puerto Real y El
Puerto de Santa María, se encontraría el
Portus Gaditanus, una
antigua población romana donde los antiguos viajeros de la Vía Augusta
podían dejar sus ropajes y dar descanso a sus caballos. La ruta desde
aquí, conducía a Las Tablas, pasando por
Asta Regia, ahora Mesas
de Asta, 11 kilómetros al oeste de Jerez de la Frontera, la cual también
se ha señalado como antigua ubicación romana.
Sin embargo, y dada
la importancia de Jerez, el camino ha sido señalizado de manera que el
caminante puede hacer una parada en esta rica ciudad y pueda contemplar
su Iglesia de Santiago, de estilo gótico, ubicada en la Plaza del mismo
nombre. En otros lugares como Puerto Real, señalado como otra de las
paradas posibles, pueden verse las conchas, colocadas por la Asociación
Jacobea, que señalan que el viajero va por buen camino.
A su paso por
El Puerto, el viajero se encuentra con el Puente de San Alejandro,
antiguo puente que cruzaba el río Guadalete desde tiempos históricos. En
esta parte de la Vía se encuentra el denominado Camino de Roma o Camino
de los Romanos, donde actualmente puede verse un cartel reafirmando que
la Vía Augusta pasaba por ahí.
Los lugares más paisajísticos y
rurales de la ruta que el viajero puede ver son el Parque Metropolitano
de Los Toruños y Pinar de la Algaida (entre Puerto Real y El Puerto de
Santa María), la zona de Guadalcacín, con las Lagunas Saladas, reservas
naturales como Chica o la Sierra de Gibalbín, que lleva al viajero por
el sendero paralelo al río Guadalquivir.
En Mesas de Asta se dice
que en su zona más alta, en esta parte del camino, hace 3.000 años quien
miraba al horizonte podía ver el mar. Hoy no se ve pero existen aún
restos de él presentes en la zona, como indica la existencia de conchas
marinas.
En el tramo de la Sierra de Gibalbín se han encontrado
cuatro villas romanas antiguas: Romanina Alta, Haza de la Torre, Fuente
de Salud y La Isleta. Muchas de estas villas servían para los romanos
como posadas o
mansios para descansar en su camino por la Vía Augusta.
La
frontera que separa las provincias de Cádiz y Sevilla era uno de los
lugares más significativos donde los romanos hacían una de las paradas
de su viaje. En ella se sitúa El Cuervo, donde se encontraba una de las
Casas de Postas, lugares que servían de reposo y descanso para los
viajeros y sus animales de la Vía Augusta.
La ruta también atraviesa
Las Cabezas de San Juan, donde pueden verse las Atalayas de Montújar.
Según los historiadores estas torres fueron construidas antes de la
llegada de los romanos, en concreto por el general cartaginés Aníbal.
Sin embargo, posteriormente fueron heredadas por los árabes quienes les
darían su nombre actual.
Desde Utrera a Sevilla, el camino se divide
en dos variantes que el viajero puede elegir para proseguir su camino en
la ruta. Ambos caminos están señalizados. Por esta zona se encuentra el
ya citado Puente de las Alcantarillas.
|
Puente de Alcantarilla, entre Las Cabezas y Utrera (Sevilla) [Imagen: Blog Entorno a Jerez] |
El punto final del sendero
es la Catedral de Sevilla, de estilo gótico tardío, una impresionante
construcción que el viajero no debe perderse por su riqueza
arquitectónica y monumental. Es aquí donde la Vía Augusta se conecta con
la Vía de la Plata. Aunque la calzada romana, la más larga jamás
construida en España, prosigue hasta Los Pirineos, la unión de la Vía
Augusta con la de La Plata supone el trayecto más largo para llegar a
Santiago de entre los peninsulares. Según la Asociación Gaditana Jacobea
Vía Augusta, cada vez hay más peregrinos que parten desde Cádiz con
rumbo al Camino de Santiago.
La
Vía Augusta original es
la calzada romana más larga de la antigua
Hispania (España) con una longitud de
1500 kilómetros que discurrían
desde Los Pirineos hasta Gades (Cádiz). Esta vía fue construida por los
romanos para conectar la sede del imperio, Roma, con el sur de España.
La calzada pasaba por Híspalis (Sevilla), pasaba también por Córdoba y
conectada con Cartagena desde donde se recorre el resto de la vía a
través de la costa mediterránea.
La Vía Augusta se citaba en el denominado
Itinerario Antonino, y se describía así como eje principal de la red viaria entre la
Hispania romana y la misma Roma. Se comunicaba con la
Via Domitia, la cual a través de la Galia Narbonense enlazaba con la
Ciudad Eterna. El nombre original de esta vía era
Vía Augusta Julia,
honrando a los emperadores Julio César y Augusto, interventores de la
construcción de este camino hacia finales del siglo I a.C.
Su nombre ha quedado en el callejero urbano de la ciudad de Cádiz, la antigua
Gades:
Vía Augusta Julia, que es la que conecta la ciudad de Cádiz a través
del istmo con San Fernando, su última calle en el espacio, la más
antigua en el tiempo.
Más información:
www.asociaciongaditanajacobea.org
[Fuente: Patronato Provincial de Turismo de Cádiz]