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Palacio de la Aduana, sede del Museo de Málaga. [Foto: Junta de Andalucía] |
El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía
ha aprobado la creación del
Museo de Málaga como servicio
administrativo con gestión diferenciada. El nuevo organismo, adscrito a
la
Consejería de Cultura,
se encargará de impulsar esta institución que
volverá a abrir sus
puertas el 12 de diciembre de 2016 tras la rehabilitación del Palacio de
la Aduana como sede única de sus colecciones de Bellas Artes y
Arqueología.
Al acto oficial previsto para dicha jornada seguirá la apertura para el público general al día siguiente, martes 13 de diciembre de 2016.
El organigrama del nuevo servicio estará integrado por la
Dirección, que desempeñará una persona funcionaria de carrera de la
Administración de la Junta con titulación superior y experiencia
museística, y tres áreas (Administración, Conservación y Difusión).
Asimismo dispondrá de una comisión técnica de consulta y asesoramiento,
compuesta por seis vocales designados entre funcionarios y profesionales
de reconocido prestigio. Esta estructura permitirá una mayor
flexibilidad y eficacia en la gestión.
Junto con la creación del servicio, el Ejecutivo andaluz ha
aprobado también una modificación de la Relación de Puestos de Trabajo
de la Consejería de Cultura con el fin de ampliar su plantilla y
adecuarla a las necesidades del museo. Para ello se crean 37 puestos
para empleados públicos, que elevarán a 68 la dotación total de personal
del centro. Por otra parte, el Museo de Málaga cuenta ya con 2,5
millones de euros consignados en los presupuestos de la comunidad
autónoma para 2017.
El Museo de Málaga abrirá sus puertas una vez concluido el
proceso de traspaso de la gestión a la Junta. La rehabilitación y
adecuación museográfica del Palacio de la Aduana, desarrollada por la
Administración central entre 2009 y 2014, incluyó la dotación de 4.456
metros cuadrados de espacios expositivos. En ellos se mostrarán 2.700
del total de 17.000 piezas y obras que conforman la colección de las
antiguas sedes de Bellas Artes y Arqueología, clausuradas en 1996 y
1997, respectivamente.
La sección de Arqueología cuenta con unas 2.000 piezas
procedentes en su mayor parte de yacimientos de la provincia de Málaga,
con una cronología que se extiende desde la Prehistoria hasta la Edad
Media. Destacan las esculturas de mármol de la Colección Loringiana, los
fondos fenicios y romanos y las producciones cerámicas y de maderas
talladas musulmanas.
Entre otros elementos singulares, se expondrán en el Palacio
de la Aduana los restos óseos del neanderthal de Zafarraya, el material
lítico del Paleolítico de Nerja, el medallón fenicio de Tramayar, los
recientes hallazgos de la tumbas de Chorreras y del casco histórico
malagueño, el mosaico del Nacimiento de Venus y las colecciones
cerámicas de loza dorada procedentes de La Alcazaba.
La colección de Arte destaca sobre todo por la pintura del
siglo XIX, con cuadros de Joaquín Sorolla, Federico de Madrazo, Vicente
Palmaroli, Enrique Simonet, Francisco Domingo Marqués, Emilio Sala,
Martínez Cubells, Jiménez Aranda, Juan Antonio Benlliure y Enrique
Mélida. A ellos se suman obras representativas de la producción
malagueña, especialmente de pintores como José Gartner, Emilio Ocón,
Bernardo Ferrándiz, José Denis Belgrano, Fernando Labrada, Antonio Muñoz
Degrain, José Moreno Carbonero, José Nogales o Enrique Simonet.
Del siglo XX sobresale la producción de vanguardia de José
Moreno Villa y la colección de obras de Picasso procedentes del Legado
Sabartés, así como la muestra de arte local de las generaciones de los
años 50 y 80.
Como obras singulares por su especial valor, destacan en la
colección del Museo de Málaga las pinturas 'Ecce Homo' y 'Dolorosa', de
Luis de Morales; 'San Francisco de Asis', de Murillo; 'Bebedor vasco',
de Joaquín Sorolla; 'El viejo de la manta', de Picasso; 'Esclava en
venta', de José Jiménez Aranda; 'El milagro de Santa Casilda', de José
Nogales, y 'Anatomía del corazón', de Enrique Simonet, además de
esculturas como 'Cabeza de San Juan de Dios', de Fernando Ortiz, o 'San
Antón', de Pedro de Mena.
A la importancia que ofrece el periodo histórico de la
Málaga del siglo XIX en la colección de arte se suma la propia elección
como sede de un edificio tan representativo de la época como el Palacio
de la Aduana.
Con más de 18.402 metros cuadrados construidos, el inmueble
es ya una obra de arte en sí mismo. Edificado a finales del siglo XVIII
para dotar a Málaga de una aduana acorde con el creciente comercio
marítimo de su puerto, este palacete neoclásico fue diseñado por Manuel
Martín Rodríguez con una clara influencia del estilo de Sabatini.
Utilizado durante décadas como sede administrativa y comisaría, el
proyecto de su rehabilitación y adaptación devolvió al edificio la
cubierta original diseñada a dos aguas que se perdió en un incendio de
1922.
[Fuentes: Junta de Andalucía y Málaga Hoy]